Llega el verano, un periodo en el que se pasa más tiempo fuera de casa, de vacaciones, en la playa o la piscina. Y por ello es habitual que en la temporada estival haya más excesos o descuidos. Sin embargo, no hay que descuidar la salud, especialmente la salud bucodental. Para ayudarte en este artículo hemos reunido 10 consejos para cuidar tus dientes en verano.
Beber agua regularmente en verano es muy importante para evitar la deshidratación. Pero también estar hidratado es positivo para la salud bucodental. Esto se debe a que si la boca no está lo suficientemente hidratada se produce menor cantidad de saliva y como consecuencia los dientes están más desprotegidos y hay más probabilidades de que el esmalte dental sufra.
Como decíamos al comienzo del artículo es normal que en verano se cambien los hábitos. Pero eso no debe significar que no cumplas con tu rutina de higiene bucodental. Debes cepillar tus dientes al menos tres veces al día, aunque es mejor hacerlo tras cada comida.
En verano se suele comer o cenar fuera de casa con mayor regularidad que en otras temporadas del año. Y seguro que en esos casos no tendrás un cepillo de dientes a mano para cumplir con tu rutina de higiene.
Sin embargo, puedes echar a tu bolso o mochila chicles sin azúcar para masticar en esos casos. Y es que ayudan a eliminar la suciedad de las piezas dentales. Por lo que los chicles sin azúcar pueden ser una alternativa al cepillo de dientes cuando no se disponga de esta herramienta.
Durante la temporada estival debes seguir cuidando la alimentación, a pesar de que cambien tus costumbres. En tu dieta no pueden faltar frutas y verduras. Puedes apostar por elaborar alimentos saludables y frescos perfectos para estas fechas como gazpacho, ensaladas, macedonia o helados de frutas naturales.
Si quieres lucir una sonrisa en verano no sólo tienes que cuidar tus dientes, también tus labios. Tienes que aplicarte protector labial para evitar que se sequen y sufran por los rayos solares.
Un cóctel por la noche, una cerveza bien fresca en una terraza, un poco de vino durante la comida… En verano apetece más que nunca tomar algo de alcohol. No obstante, no hay que abusar de este tipo de bebidas porque favorecen la aparición de manchas, caries y provoca halitosis.
En verano apetece tomar alimentos fríos para sobrellevar mejor las altas temperaturas. Pero hay que tener cuidado con este tipo de alimentos. Y es que el contraste entre frío y calor favorece la sensibilidad dental. Así que ten cuidado con los helados, los granizados y las bebidas demasiado frías.
Los alimentos ricos en azúcares son perjudiciales para la dentadura porque pueden provocar caries y sensibilidad. Así que intenta reducir la ingesta de este tipo de alimentos en verano.
Si te vas de vacaciones en tu maleta no puede faltar un neceser con un kit con los productos básicos para cuidar tu dentadura. En el neceser como mínimo debes echar un cepillo de dientes, pasta e hilo dental.
Si sientes cualquier tipo de molestia durante el verano es importante que acudas a tu dentista de confianza. Así como deberías acudir simplemente por prevención al menos dos veces al año.
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Estos son algunos consejos que te ayudarán a cuidar tus dientes este verano. Porque el disfrute y la diversión no están reñidos con la salud bucodental.
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