¿Qué retos deberán afrontar las empresas en los próximos meses?

Sea como sea, tenemos claro que el mercado será muy volátil y que las marcas tendrán que comunicarse con consumidores mucho más caseros de lo habitual y con mayor preocupación por su salud.

¿Qué espera a los consumidores cuando cambiemos la hoja del calendario y 2020 deje paso a 2021? Hacer quinielas en estos tiempos, en los que el coronavirus hace que las cosas cambien a velocidades de vértigo y en los que parece imposible saber qué ocurrirá ya no a un mes sino hasta a una semana vista, parece demasiado arriesgado. Aun así, las marcas y las empresas necesitan esos planes, porque son los que les ayudan a perfilar sus estrategias y a determinar cómo y en qué invertir recursos.

Parece bastante seguro que el efecto del coronavirus seguirá con nosotros en el futuro, incluso más allá del lo que denominemos final de la pandemia y la aparición de los recursos que permitan controlar los contagios. En los meses que se avecinan, de forma incuestionable, los cambios seguirán a ritmo de vértigo.

Gestionar la recesión

Parece que fue un siglo cuando los analistas y economistas todavía se preguntaban si la crisis del coronavirus iba a estar seguida por una fuerte recesión económica. Si la crisis duraba poco, se decía entonces, era posible que no hubiese una. La crisis no ha durado poco y ahora las marcas ya asumen que tendrán que navegar esas complejas aguas. El primer reto al que cree que tendrán que enfrentarse las empresas es justamente ese: tendrán que responder a la recesión.

Los recortes en la inversión por parte de las marcas ya se han hecho de notar. Los datos dicen que cerca del 70% de las marcas se plantean hacer recortes en publicidad. Algunas áreas como el video online sí que podrán ver un aumento en su inversión, puesto que la cifra invertida es mucho menos en este tipo de publicidad. Plataformas como Tik Tok o Facebook serán las principales ganadoras en este sentido, ya que la inversión publicitaria aumentará.

Efectividad en el ecommerce

Como podemos ver en los datos que se han ido publicando desde que comenzamos el periodo de confinamiento el comercio electrónico no ha hecho más que crecer durante la pandemia. Esta tendencia al alza se mantendrá durante los meses e incluso los años que se avecinan.

Las empresas ya no pueden plantearse el ecommerce como una segunda opción, es importante que dispingan de una tienda online. Y es que el comercio electrónico hoy en día hay que verlo como una pieza esencial para conseguir mantener sus niveles de venta.

Esto modifica los procesos de venta, pero también abre nuevos retos. Por ejemplo, los procesos de entrega y el packaging se han convertido en los nuevos puntos de contacto entre marcas y consumidores.

El consumidor se queda en casa

Las medidas de confinamiento impuestas por el gobierno y las que se imponen por voluntad propia los consumidores para ser mas responsables hace que la mayoría de los ciudadanos pasen cada vez menos tiempo fuera de casa. Los marketeros, viendo esta situación donde los consumidores optan por un estilo de vida más hogareño, se han visto obligados a cambiar su forma de cómo vender y como integrarse en la vida de los consumidores.

Estos deben descubrir cómo pueden trazar nuevas estrategias que les permitan vender a este nuevo tipo de consumidor durante 2021.

Las acciones de marca deben orientarse a los medios que se consumen desde el hogar, pero también deben tener en cuenta otras implicaciones. Una de ellas es la de que los consumidores buscan mejorar su vida casera, por lo que las marcas deben darles las claves para hacerlo.

Prepararse para un mercado más volátil

Además, los cambios sociales que ya iban marcando la agenda antes del coronavirus se han acelerado durante estos últimos meses, especialmente en algunos mercados. Esto ha hecho que los mercados sean más volátiles y que la posición de las marcas deba ser mucho más sólida en sus respectivos sectores. Por tanto, las compañías tendrán que trabajar mucho más la estrategia en términos de propósito y conexión con la sociedad.

El tirón de la salud

En el mundo post-coronavirus, la salud y el bienestar se convertirán en piezas fundamentales de lo que los consumidores quieren y lo que las marcas deben ofrecer. Por ello, encontrar el hueco en salud y bienestar será uno de los grandes retos de las compañías y los marketeros durante 2021.